Martes 19 Junio 2018
** Enfermedad ocasionada por la picadura de una garrapata infectada; se asocia a malas condiciones de higiene en el hogar y en las mascotas
** Es importante retirar la garrapata de inmediato con unas pinzas, procurando tomarla de la cabeza, tirando de ella con movimiento lento pero constante para retirarla por completo y lavar la zona con agua y jabón
En temporada de calor se incrementa la proliferación de garrapatas, que constituyen uno de los parásitos externos más comunes y dañinos para las mascotas, además, se encuentran en el suelo de zonas donde hay plantas y arbustos.
Debido a lo anterior, aumenta también el riesgo de que las personas puedan sufrir picaduras de estos ácaros, por lo que la Secretaría de Salud, exhorta a la población a tomar medidas preventivas para evitar afecciones a la salud por rickettsiosis.
Las garrapatas se pegan a los animales o a las personas cuando pasan por el lugar de infestación, adhiriéndose firmemente a la piel, para trasladarse a zonas más calientes como axilas, cabeza, etc. en donde comienzan a chupar sangre para alimentarse. Este proceso no es doloroso, por lo que la mayoría de los afectados no se percata de que trae una garrapata.
El responsable estatal de la Subdirección de Epidemiologia, Gumaro Barrios Gallegos, informó que la rickettsiosis es una enfermedad causada por bacterias del género rickettsia, que se alojan en las garrapatas, y que en caso de no atenderse a tiempo, puede derivar en la muerte.
La picadura de una garrapata infectada puede causar síntomas como fiebre, dolor de cabeza, náuseas, dificultad para respirar, tos, vómito, variación en la temperatura corporal, dolor muscular y erupciones cutáneas, lo que afecta con el tiempo la calidad de vida de las personas.
Por lo anterior, se recomienda tomar las medidas de higiene personal y del hogar para prevenir las picaduras, tales como; bañarse y revisarse constantemente, así como barrer, trapear y fumigar al interior y exterior de la casa, pues los parásitos pueden anidar en cualquier lugar, principalmente en rincones de ventanas y objetos con orificios, en patios y jardines con maleza.
Las mascotas son mayormente susceptibles de alojar a las garrapatas entre su pelaje, por lo que es primordial la vigilancia, revisión e higiene de forma continua, así como el baño regular, la desparasitación y llevarlas al veterinario por lo menos dos veces al año.
Si encuentra una garrapata en su cuerpo, es importante retirarla de inmediato con unas pinzas, procurando tomarla de la cabeza, tirando de ella con movimiento lento pero constante, no aplicar calor, vaselina, alcohol u otras sustancias, no retorcerla para sacarla, sino procurar hacerlo de forma que salga completamente. Posteriormente lavar bien la zona de la picadura con agua y jabón, y acudir a la brevedad posible a la unidad de salud más cercana, para recibir atención y tratamiento oportuno.
** Es importante retirar la garrapata de inmediato con unas pinzas, procurando tomarla de la cabeza, tirando de ella con movimiento lento pero constante para retirarla por completo y lavar la zona con agua y jabón
En temporada de calor se incrementa la proliferación de garrapatas, que constituyen uno de los parásitos externos más comunes y dañinos para las mascotas, además, se encuentran en el suelo de zonas donde hay plantas y arbustos.
Debido a lo anterior, aumenta también el riesgo de que las personas puedan sufrir picaduras de estos ácaros, por lo que la Secretaría de Salud, exhorta a la población a tomar medidas preventivas para evitar afecciones a la salud por rickettsiosis.
Las garrapatas se pegan a los animales o a las personas cuando pasan por el lugar de infestación, adhiriéndose firmemente a la piel, para trasladarse a zonas más calientes como axilas, cabeza, etc. en donde comienzan a chupar sangre para alimentarse. Este proceso no es doloroso, por lo que la mayoría de los afectados no se percata de que trae una garrapata.
El responsable estatal de la Subdirección de Epidemiologia, Gumaro Barrios Gallegos, informó que la rickettsiosis es una enfermedad causada por bacterias del género rickettsia, que se alojan en las garrapatas, y que en caso de no atenderse a tiempo, puede derivar en la muerte.
La picadura de una garrapata infectada puede causar síntomas como fiebre, dolor de cabeza, náuseas, dificultad para respirar, tos, vómito, variación en la temperatura corporal, dolor muscular y erupciones cutáneas, lo que afecta con el tiempo la calidad de vida de las personas.
Por lo anterior, se recomienda tomar las medidas de higiene personal y del hogar para prevenir las picaduras, tales como; bañarse y revisarse constantemente, así como barrer, trapear y fumigar al interior y exterior de la casa, pues los parásitos pueden anidar en cualquier lugar, principalmente en rincones de ventanas y objetos con orificios, en patios y jardines con maleza.
Las mascotas son mayormente susceptibles de alojar a las garrapatas entre su pelaje, por lo que es primordial la vigilancia, revisión e higiene de forma continua, así como el baño regular, la desparasitación y llevarlas al veterinario por lo menos dos veces al año.
Si encuentra una garrapata en su cuerpo, es importante retirarla de inmediato con unas pinzas, procurando tomarla de la cabeza, tirando de ella con movimiento lento pero constante, no aplicar calor, vaselina, alcohol u otras sustancias, no retorcerla para sacarla, sino procurar hacerlo de forma que salga completamente. Posteriormente lavar bien la zona de la picadura con agua y jabón, y acudir a la brevedad posible a la unidad de salud más cercana, para recibir atención y tratamiento oportuno.