En su participación en el Encuentro Nacional Anticorrupción, el vicepresidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, destaca que se requieren criterios comunes, comunicación entre instituciones y un sistema para alertar de los riesgos
Viernes 02 Octubre 2020
El combate a la corrupción se asemeja a una Torre de Babel en la que no todos hablamos el mismo idioma, por lo que se requiere una coordinación interinstitucional, más sólida y entender conceptos que son muy importantes desde una perspectiva comunitaria, señaló Sandro García Rojas Castillo, vicepresidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
En su participación por video-conferencia en el Encuentro Nacional Anticorrupción, García indicó que gran parte de los órganos de control de las fiscalías, los órganos fiscalizadores de la Secretaría de la Función Pública, Auditoría Superior y auditoría de los estados, requieren de técnicas, especialidades y acuerdos en cuanto a un criterio común para el combate a la corrupción.
Destacó que se requiere comunicación entre instituciones, homologación de criterios y de capacidades para que todos los que están dedicados a estos temas, hablen el mismo idioma.
Dijo que la última evaluación que hace a México, el Grupo de Acción Financiera, instancia especializada en materia de prevención y combate al lavado de dinero, establece que al sistema financiero mexicano todavía le hace mucha falta tener un sistema de alertamiento y conocimiento sobre los riesgos que corre en términos de corrupción
“Es decir todo mundo sabe, todo mundo conoce, pero no necesariamente cuando vemos una investigación, que alguien pide estados de cuenta de un funcionario que se presume corrupto, evidentemente ese funcionario no en todos los casos deposita el dinero mal habido en su cuenta”, señaló.
Expuso que si no se tiene un enfoque basado en riesgo, el sistema mexicano se enfrenta a un escenario que tiene dos complejidades.
La primera, indicó, es que todos los riesgos parecen iguales y todos los fenómenos parecen alarmantes.
Señaló que también existe la terrible situación de no tener las herramientas para poder supervisar, investigar y fiscalizar todos los casos.
Consideró que es necesario fomentar en la ciudadanía los valores de la integridad y no apuntar todos los reflectores hacia el tema del combate solamente.
“Yo sí creo que hace falta una voz que sume, que reúna propuestas concretas. De una manera muy práctica con talleres, foros de fiscales, de colegios de fiscalizadores”, concluyó.
En su participación por video-conferencia en el Encuentro Nacional Anticorrupción, García indicó que gran parte de los órganos de control de las fiscalías, los órganos fiscalizadores de la Secretaría de la Función Pública, Auditoría Superior y auditoría de los estados, requieren de técnicas, especialidades y acuerdos en cuanto a un criterio común para el combate a la corrupción.
Destacó que se requiere comunicación entre instituciones, homologación de criterios y de capacidades para que todos los que están dedicados a estos temas, hablen el mismo idioma.
Dijo que la última evaluación que hace a México, el Grupo de Acción Financiera, instancia especializada en materia de prevención y combate al lavado de dinero, establece que al sistema financiero mexicano todavía le hace mucha falta tener un sistema de alertamiento y conocimiento sobre los riesgos que corre en términos de corrupción
“Es decir todo mundo sabe, todo mundo conoce, pero no necesariamente cuando vemos una investigación, que alguien pide estados de cuenta de un funcionario que se presume corrupto, evidentemente ese funcionario no en todos los casos deposita el dinero mal habido en su cuenta”, señaló.
Expuso que si no se tiene un enfoque basado en riesgo, el sistema mexicano se enfrenta a un escenario que tiene dos complejidades.
La primera, indicó, es que todos los riesgos parecen iguales y todos los fenómenos parecen alarmantes.
Señaló que también existe la terrible situación de no tener las herramientas para poder supervisar, investigar y fiscalizar todos los casos.
Consideró que es necesario fomentar en la ciudadanía los valores de la integridad y no apuntar todos los reflectores hacia el tema del combate solamente.
“Yo sí creo que hace falta una voz que sume, que reúna propuestas concretas. De una manera muy práctica con talleres, foros de fiscales, de colegios de fiscalizadores”, concluyó.